‘Y, con cuidado, detuvo el Tiempo durante todo el tiempo que lo deseó’ (Seda / A. Baricco)
Levantarte a las 7, meterte en la ducha dormida, entrar en el metro de lado y llegar a clase para darte cuenta- tras 20 minutos de paciente espera – de que tu profesor no va a venir, quizá no sea la mejor forma de empezar el día.
Claro que podría haber sido peor, me digo…
El Furby podría haber venido. Y yo habría tenido que oír su ceceo durante hora y media sin poder apartar la vista de esas enormes orejas peludas que tanto asco me dan.
O podría haber avisado. Y yo no habría llegado tan temprano. Y me habría perdido la niebla y las luces amarillas y la hierba cubierta de rocío y las hojas, atrapadas finalmente en montones mojados junto a los árboles.
(…)
Hace un año por estas mismas fechas mi única meta era acabar primero. Este curso me doy con un canto en los dientes con llegar al jueves sin haber tirado la toalla.
Y a veces pienso que si no fuera por estas mañanas en las que consigo, de alguna manera, detener el tiempo y caminar sin prisa y observar todas las cosas bonitas que me voy encontrando y esperar… hace un mes que lo habría hecho.
(…)
Pd.- Sí, por fin me lo he leído. Y me ha encantado. Un beso, Abu.
(…)
Añado este vídeo que Jotapé ha intentado dejarme en un comment, y no hay manera de que salga…
noviembre 20, 2010 at 11:09
Yo olvidé cómo se detiene el tiempo…
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noviembre 20, 2010 at 12:54
Ningún problema, ya te lo recuerdo yo (verás que es como montar en bici 😉 ).
Fundamental: salir con tiempo y prestar atención mientras caminas. Si lo haces, al final siempre encuentras cosas que siguen siendo hermosas independientemente de lo que pase a su alrededor (no te imaginas cuántas hay…) Y cuando las encuentras, instintivamente miras a la gente que pasa a tu lado, y te asombra comprobar que la mayoría va mirando al suelo, o al frente, y simplemente no las ven (tampoco te ven a ti)… Entonces ralentizas el paso y dejas que te pasen. Luego eliges alguna de esas cosas (un delgadísima rama seca cubierta de gotas perfectamente esféricas, como hice yo el jueves) y te paras frente a ella… te aseguro que el tiempo se detiene. Si encima llevas música en los oídos, ni te cuento…
Ea, ya no tienes excusa, así que a practicar¡ 😀
Un beso enorme enorme, J.
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noviembre 20, 2010 at 13:39
Bueno, dicho así, me pongo ahora mismo a practicar aunque puedo asegurarte que algunas de esas cosas las suelo hacer, especialmente cuando me encuentro rodeado de gente y sin embargo me embarga el «momento Casper», nadie me ve, ni me siente, ni me toca…
No tengo excusa. Me pongo con ello.
Un besote lleno de gotas perfectamente esféricas…
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noviembre 21, 2010 at 9:32
No que no la tienes¡ Es más, ya estás tardando¡¡¡ 😀
Un beso de domingo.
PD.- Pss, no tienes ningún finde libre por ahí para hacerme una visitilla? Esta vez intentaría que mi chinorri no se pusiera mala y ser yo la que te llevara al centro a beber sangría 8)
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noviembre 21, 2010 at 10:52
Prometo buscar uno lo antes posible, pero te veo tan ‘liá’ con los estudios que me da palo ir a interrumpir…
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noviembre 22, 2010 at 9:38
Qué palo, ni palo… 8)
Eso sí, avísame con una semanilla o así, pa’que no esté la casa manga por hombro, jeje.
Un besazo, guapo.
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noviembre 21, 2010 at 0:13
Uh, no sé cómo pero me acordé de esta escena de Waking Life que siempre me deja pensando (claro, igual sigo haciendo la hormiga por la vida ..pero igual me resulta inspiradora )
Naaaabrazo.
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noviembre 21, 2010 at 0:14
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noviembre 21, 2010 at 9:10
No conocía esta peli (ni de oídas, vamos), pero después de ver la muestra que me has dejado voy a intentar bajármela hoy mismo.
Por cierto, me encanta (aunque no salgan niños zombies, ninjas, ni bailarines gays 8) )¡¡¡¡¡
So thanks a lot 😀
Nnnnabrazo.
Pd.- También hay hormigas con alas, lo sabías?
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noviembre 22, 2010 at 9:40
No te lo he comentado, pero los jueves, cuando voy hacia el metro, paso al lado de un local que han puesto nuevo (no sé ni qué venden) que se llama ‘Jotape’.
No es coña.
😀
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noviembre 21, 2010 at 14:20
El tiempo físico es permanente y continuo y detenerlo es una quimera. Cada día amanece y anochece.
Pero el tiempo más importantes es el filosófico, que se definió como una medida de movimiento entre lo anterior y lo posterior, o al menos eso decía Aristóteles.
Por tanto deteniendo el movimiento se detiene el tiempo.
Comparto tu punto de vista, porque ese caminar ralentizado que nos permite ver más y mejor lo que nos rodea es una forma perfecta (y necesaria) de detener el tiempo.
Ummmm, veo que lees libros interesantes…
Un fuerte abrazo, ánimo y no me tire usted la toalla.
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noviembre 22, 2010 at 9:37
La verdad es que últimamente leo tan poco que no me arriesgo, voy directamente a los libros que me han regalado. Y es que si alguien te regala un libro porque algo en él le ha hecho pensar en ti, habrá que averiguar qué ha sido, digo yo 😉
En cuanto a tirar la toalla, bueno, voy a trompicones, pero de momento sigo yendo a clase. Y si algún día, normalmente los jueves, logro detener el movimiento (como tú dices), eso me pone las pilas hasta el siguiente.
Lo malo son los lunes…
Un beso enorme, Abu. Y gracias, como siempre, por estar…
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